Mi esposo y yo nos convertimos en padres, sin embargo...
Mi esposo continuó con su trabajo, yo no.
Mi esposo no disminuyó sus ingresos, yo si, cero.
Mi esposo continúa acumulando experiencia laboral, yo me aprendí manuales de Lactancia materna, apego seguro, alimentación complementaria, porteo, todos aplicados con éxito a mi beba...pero nada de eso es para el CV.
Mi esposo mantiene sus pasatiempos, yo no puedo salir sin que alguien me pregunte ¿con quién dejé a la bebé?
Mi esposo no tuvo que rechazar ofertas laborales porque no son compatibles con la crianza, yo sí.
Mi esposo duerme de corrido, yo no, soy feliz dando lactancia pero cansan las tomas nocturnas.
No, no estamos en las mismas condiciones, mientras la sociedad no reconozca que la crianza es un TRABAJO no remunerado más demandante que cualquier chamba, por ello debe ser deseada y que dé condiciones para ser compartida.
Ahora soy más empática con otras mujeres, por años las han llamado mantenidas cuando en toda la historia fueron y son las que han mantenido viva a la humanidad.
Aún queda mucho por hacer
Créditos a quien corresponda.